Por fin Viernes.Te veré.
Sueño el
lunes cuando crecíamos como pequeños zhar-ptitsas. Estudiábamos, jugábamos,
compartíamos nuestras vidas, atinadas por los embates de otros. De fondo una
melodía constantemente alegre, nos veíamos, nos mirábamos, en la distancia,
nadie sabe, qué sabe nadie.
Despertar
lluvioso, lejanía del sol, triste repiqueteo sobre la ventana, cristales
heridos por los golpecitos incesantes. Hoy, segundo periplo, no veré el cabello
mesado por la brisa del mediodía, revueltos en tus carreras de la mañana ala
tarde. El clima nos destrozó el furtivo encuentro entre la maleza. Juegos de
escondites y confidencias. De escarceos y complicidades. Clima que incendias,
clima que ahogas, tolérate clima.
En el
ecuador del misterioso calendario, temeroso de la jugada de las agujas del
cielo. Tercero, no escucho, repiqueteos. La sonrisa me vuelve al rostro, bueno
más que al rostro, aparece en mi interior. Ya sé que cuando llueve las plantas
reciben el néctar, disfrutan recibiendo en su cuerpo las caricias de las sedas
ofrecidas desde el cielo. Saco una mano, uuys, miro, medio cuerpo, zas, entero.
Buena sensación, la maquinita hoy disfrutaría, estamos recién pasado la lluvia.
La temperatura agradable, ni frío ni calor, sí, sí pero no es cero grados,
jeje. Se hace pasajero. No te miro, pero te siento, te escucho, te pienso, y
entonces sí te veo, en mis adentros.
Culminante
víspera, alargadas ofrendas, jueves es. Día de reflexión en la premisa del
codiciado hecho. Iremos, haremos, subiremos donde no podamos bajar, bajaremos
de donde no debiéramos haber subido, planearemos, después ya veremos. O hubiere
ido, o quizás no. Bueno, de momento planes sólo son. Ninguno propone, después
todos disponen, jeje. Difícil mezcla, nadie quiere, todos mandan. Nadie sabe,
todos enseñan. Atrevida situación la conseguida y anhelada excursión. A dormir,
que mañana es el día, mañana será. Y no podrás evitarlo, por mucho que quieras
desearlo. Hasta mañana.
Luz que
penetras en mi ventana. Sol que siempre me llamas. Hoy no me hace falta. La
brisa viene cargada de aroma, el azahar llegó desde lejos, el galán de noche
espera impaciente su explosión de júbilo, podrá mostrarse cual es. La
incomprensión desaparecerá. La luz del sol brillará. Acompañará el maravilloso
día. Viernes anhelado, viernes logrado.
Hoy saldré
a recibir las dagas de la pasión. Deleitándome al sentir rasgarme la piel con
sus uñas. Humedeciéndome el torso con sus labios. Sintiendo como rodeas mi
frágil cuerpo con tus tentáculos brazos. Tus piernas me harán sentir el prieto
mimo de la hembra. Sentiré extasiado como devoras tu alimento, entregado cuan
macho de mantis. Sin importarme si decides mantenerme o eliminarme. Pues te
habré gozado. Me habrás gozado. Nos habremos gozado. Eso es imposible de
olvidar. Imposible de aparcar. Inimaginable borrar la huella.
Hoy es viernes, te veré. Hoy es viernes, te
idolatraré. Hoy es viernes, te gozaré. Hoy es viernes, te me entregaré. Hoy es
viernes, nada me importa, me tienes.
Hoy es viernes, te veré. Hoy es viernes, te idolatraré. Hoy es viernes, te gozaré. Hoy es viernes, te me entregaré. Hoy es viernes, nada me importa, me tienes…. Magistrales y apasionadas letras, el amor y la sensualidad se respira en el ambiente al leerte, felicidades poeta haces de cada sentimiento una bella poesía.
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